Qué difícil nos resulta, en muchas ocasiones, competir con una «pantallita» o un video juego. Puedes estar haciendo la mejor y más motivante actividad o juego motor que si alguien aparece con un dispositivo móvil es inevitable que la atención de todos los niños, o de la mayoría, sea absorbida por este.
Con la intención de seguir utilizando la estrategia de «si no podemos con nuestro enemigo, unámonos a él», nace este nuevo juego que comparto contigo para que puedas llevarlo a la práctica en el patio de tu cole.
¡Hoy es el turno de Pokémon Go. Todavía recuerdo, hace unos años, a los niños/as por la calle con los dispositivos móviles intentando cazar los Pokemon que aparecían en distintos puntos de su localidad.
¿Qué te parece si aprovechamos esa motivación y el conocimiento previo para crear un juego que no necesite de dispositivos móviles y fomentamos mucho más el movimiento y el trabajo en equipo? ¿Lo intentamos? ¡Te cuento mi experiencia!

Objetivo del juego.
Al igual que en el juego original, el objetivo principal es encontrar pokemon que otros niños/as han escondido previamente. De este modo, incorporamos también la misión de saber esconderlos correctamente, alternando continuamente ambos papeles durante el juego y sumando los puntos correspondientes por estas dos acciones.
Este juego nos permitirá mejorar, principalmente, la orientación de nuestros alumnos/as poniendo en juego todas sus capacidades perceptivo-motrices, y sus habilidades para colaborar, dialogar, llegar a acuerdos y trabajar, en definitiva, en equipo.
Edad.
Como podrás observar a continuación, el juego tiene numerosas variantes y opciones que pueden aumentar su complejidad. Lo he llevado a la práctica con niños/as de Primaria, funcionando muy bien tanto con niños/as de primero como los de sexto. Ya sabes que cuánto más pequeños más les atraen y motivan las historias y personajes que lleven asociados cualquier juego, pero más esfuerzo nos llevará organizarlos y que lo comprendan.
Espacio de juego.
Se puede practicar en cualquier espacio. Yo he tenido la oportunidad de hacerlo tanto en el gimnasio como en la pista polideportiva. Lo ideal sería un espacio natural con arbustos y zonas diferentes que les aporte más opciones para esconder sus pokemon. Así, dependiendo del espacio del que dispongas deberás hacer uso de materiales para que tengan más opciones para buscar y esconder.
Como puedes observar a continuación, aparte de los árboles y otras opciones que presenta el propio medio, se pueden distribuir setas, conos o cualquier otro material que suponga una opción para esconder. Evidentemente, a más opciones para esconder, más dificultad para encontrarlos y viceversa. Tú deberás elegir y manejar estas y otras opciones, que veremos a continuación, según creas más conveniente.

Participantes y organización
Se juega por equipos cuyo número de componentes variará en función del total del grupo y del número de equipos que quieras realizar.
Así, la única condición es que siempre hagas un número de equipos pares, ya que deben enfrentarse entre ellos en cada partida y de este modo nunca se quedará ningún equipo sin jugar.
Por lo tanto y como ejemplo, para un grupo de 24 alumnos/as podríamos hacer:
- 2 equipos de 12 jugadores/as.
- 4 equipos de 6 jugadores/as.
- 6 equipos de 4 jugadores/as.
Teniendo en cuenta que por cada dos equipos tendríamos que tener un juego de pokemon, la opción que personalmente recomiendo es la de 4 equipos de 6 jugadores/as.
Material necesario.


El material principal para jugar serán los pokemon. Utilizo tapones de la leche o batidos del mismo color y pego dentro de cada uno de ellos el personaje correspondiente.
Como puedes observar en la ilustración y para la opción que te he señalado necesitarías 12 tapones (6 de cada color) y en cada color pondrías las mismas figuras o personajes.
Si en tu caso tienes más alumnos/as sería cuestión de aumentar el número de tapones de cada color y, añadir, por tanto, más personajes.
Otra alternativa sería la de hacer dos equipos más, para lo que necesitarías otra serie de personajes idéntica pero de otro color.
Además de este material, como ya te he indicado anteriormente, tendrás que utilizar, en función del tipo de espacio en el que vayas a realizar el juego, algunos conos o material similar para generar opciones donde esconder pokemon.
A continuación puedes descargar el documento para imprimir los personajes y disponer de una hoja de control para llevar la puntuación durante la partida de la que te hablaré posteriormente.
¡Empezamos la partida!
Con la intención de facilitar su comprensión partiré de un ejemplo. De este modo, y siguiendo con la línea anterior, organizamos 4 grupos de 6 alumnos/as, pidiéndoles que se pongan un nombre, que escribiremos en la hoja de control correspondiente. Para el ejemplo serán equipo A, B, C y D.
Antes de comenzar establecemos una zona de partida (zona anexa a la zona de juego) con cuatro conos para que cada equipo se disponga en cada uno de ellos, explicándoles que entre cada ronda y partida siempre deberán volver a esa zona de control.
Comenzamos la 1ª PARTIDA en la que los equipos quedan emparejados del siguiente modo: A – B y C – D.
Los equipos A y B utilizarán los tapones (pokemon) de color AZUL y los equipos C y D los de color NARANJA. Es muy importante recordarles que si encuentran un tapón del color que no es el suyo lo dejen donde está, ya que ayudarían al otro equipo a encontrarlos y, por tanto, no sumarían ningún punto por ello.
Cada partida conllevaría dos rondas, una de BÚSQUEDA y otra de ESCONDER por equipo.
RONDA 1:
- A (azules) y C (naranjas) les tocaría ESCONDER los pokemon. Dispondrían de 1 minuto para esconder los seis pokemon (tapones). Ellos deciden si cada uno esconde uno o si quieren hacerlo de otro modo. Es su decisión como equipo.
- B (azules) y D (naranjas): les tocaría BUSCAR. Mientras los otros equipos (1 minuto) los esconden ellos deben colocarse en un lugar donde no puedan verlos.
Transcurrido el minuto, a la señal, todos los equipos se colocarán en la ZONA DE PARTIDA. Les recordamos qué color de pokemon deben encontrar y a la señal dispondrán de un minuto para encontrarlos. Los equipos A y C permanecen en la misma zona observando si su equipo rival ha encontrado los pokemon que han escondido, ya que, como verás a continuación, será muy importante poder recuperarlos.
Finalizado el tiempo los equipos dejan de buscar y se colocan en la ZONA DE PARTIDA nuevamente para proceder al recuento y puntuación correspondiente.
RONDA 2: Se cambiarían los papeles entre los equipos que se están enfrentando, de tal manera que ahora:
- A (azules) y C (naranjas): les tocaría BUSCAR.
- B (azules) y D (naranjas): les tocaría ESCONDER.
Repitiendo el mismo procedimiento que hemos hecho anteriormente, haciendo el recuento y anotando la puntuación correspondiente al finalizar el tiempo.
A continuación iríamos cambiando los enfrentamientos, en función del tiempo disponible, para que todos los equipos jueguen contra todos a modo liguilla. Así, ahora podrían jugar: A – C y B – D. Por último, nos quedaría A – D y B – C.

Puntuación
La puntuación, al igual que el resto de normas, es una propuesta que a mí me funciona bien. A partir de aquí puedes modificarla según tu propia experiencia y resultados.
Personalmente me gusta darle el doble de valor a los pokemon que están mejor escondidos que a los pokemon encontrados:
- 1 pokemon encontrado = 1 PUNTO.
- 1 pokemon que no han encontrado, lo recupero y muestro = 2 PUNTOS.
Seguramente, te estarás preguntando qué es eso de recuperarlo y mostrarlo. Este detalle es uno de los más importantes para que el juego funcione y no te quedes sin la mitad de tus pokemon en la primera ronda de juego, como me pasó a mí.
Cuando le planteas a un niño/a que esconda un objeto para que nadie lo pueda encontrar, suelen buscar zonas en las que, evidentemente, no lo van a conseguir, pero tampoco los van a poder recuperar. Por ello, es muy importante que antes de comenzar el juego nuestros alumnos/as tengan claro que solamente sumarán los 2 puntos por un pokemon que hayan escondido, siempre y cuando indiquen al resto dónde lo habían escondido, comprobando que está dentro de los límites establecidos, y puedan recuperarlo para seguir jugando.
Recuerdo la primera vez que hice este juego. Los niños/as enterraban los pokemon y luego no localizaban donde los habían dejado o los metían en algún hueco por el que no podían meter la mano o sencillamente no se acordaban dónde lo habían escondido.
Con esta norma conseguimos que se responsabilicen del objeto que esconden, eligiendo un lugar que puedan recuperarlo posteriormente.
No olvides tratar este tema con mucha importancia antes de comenzar. A pesar de ello siempre es bueno tener algún pokemon demás.
Por último, si observas los pokemon tienen un número al lado del nombre de cada uno. Las primeras veces que juego les pido a mis alumnos/as que no lo tengan en cuenta, ya que todos los pokemon valen lo mismo. Cuando ya saben jugar hacemos otra partida en la que sí valen los puntos de cada pokemon. De tal manera que un pokemon que tiene un «2» valdría 2 puntos por encontrarlo y 4 puntos por esconderlo y que no lo encuentren. Esta variante se hace dándoles más tiempo con la intención de invitarles a hacer algún tipo de estrategia de equipo.
Algunas normas a tener en cuenta.
- Cualquier cono u objeto que levanten para comprobar si hay algún pokemon debajo deben dejarlo tal y como estaba.
- El tiempo que te propongo es de 1 minuto, pero puedes modificarlo según necesiten tus alumnos/as para que se desarrolle bien, teniendo en cuenta la extensión del espacio, la posibilidad para esconder, el número de alumnos o su edad y características.
- Siempre se utilizan las manos para buscar. No se pueden dar patadas a los objetos para ir más rápido.
- Si veo un pokemon de un color que no es el mío lo dejo donde está, continuo buscando y no aviso a ningún jugador del otro equipo para ayudarle.
- Si dos jugadores quieren esconder en el mismo lugar, lo hará el primero que haya llegado. En caso de empate o de no llegar a un acuerdo se hará piedra, papel o tijera.
- Los jugadores que esperan mientras los demás buscan deben estar en la zona de partida.
- Cada vez que finalice una partida nos damos la mano y felicitamos antes de comenzar los nuevos emparejamientos e independientemente del resultado.
Otras variantes y alternativas...
Modificando el tiempo y el modo en el que deben buscar y esconder podrás obtener variantes que irán aumentando la complejidad del juego y que ayudará a tus alumnos/as a enfrentarse a la tarea de modos diferentes y poniendo en juego, por tanto, otras habilidades de cooperación y trabajo en equipo. Te propongo algunas que he utilizado a continuación:
- Aumentar o reducir el tiempo para esconder y buscar los pokemon.
- Tener en cuenta la puntuación que tiene cada pokemon al lado del nombre. También se puede asignar a los pokemon alguna función, como por ejemplo que al encontrarte uno de ellos debes quedarte paralizado durante 20 segundos. Aquí pueden participar los alumnos/as proponiendo ideas según vayan poniéndolas en práctica.
- Aumentar el tiempo, pero deben esconder y buscar por parejas o tríos.
- Aumentar el tiempo, pero deben esconder y buscar todo el equipo cogido de la mano, de tal manera, que no se pueden soltar y los pokemon los llevarían en las manos los jugadores de los extremos. Si la cadena se rompe en algún momento deben volver a la zona de partida, unirse y volver para continuar con lo que estaban haciendo. Esta opción les implica tener que colaborar mucho más, hablar, escuchar, tomar acuerdos y respetarlos si quieren conseguir buenos resultados. Es cierto que la recomiendo una vez que dominan el juego y es aconsejable trabajar previamente estos conceptos para anticiparnos a posibles conflictos.
- Incorporamos el mapa. Este mismo juego es ideal para profundizar en la orientación y manejo de mapas. Es ideal porque el niño/a tiene una doble oportunidad de interpretar los mapas. La primera, para buscar algo y la segunda escondiéndolo. Como ya sabes uno de los inconvenientes que tenemos cuando queremos hacer este tipo de actividades es el tiempo que necesitamos para su organización, esconder y colocar todas las pistas. Con esta opción sencilla el maestro/a se ve liberado, se consigue una implicación más activa del alumno/a en el aprendizaje y puede hacerlo muchas más veces y en diferentes circunstancias. Solamente necesitarías copias de un mapa del lugar donde realices la actividad y lápices.
Como te he comentado, lo he practicado con niños de Primaria de cualquier edad.
Te animo a que lo pongas en práctica en clase, que lo compartas si te ha gustado y te ha sido útil con otros compañeros/as, y que, por supuesto, compartas conmigo tu experiencia. Cualquier modificación o cambio que lo mejore siempre será bien recibido. ¡Muchas gracias! ¡Feliz día!
